ce Marsy en su templo de la tragedia entrè Corneille y Racine. Me abstengo, por evitar prolixidad, de insertar aquí sus excelen tes versos latinos. La magestad al gran Cornell, su frente City Seleuco, Polieuto, Cina, Y Horacio, el rostro venerable arado 02. Con hondas rugas, it dog non corodiab toto ob theq À 4) 107067735 De Racin en tornod ar sup Amor revuela con festivas alas; El grandioso Cornell sus sentimientos En sus héroes impávidos derrama: Desc Robusta voz y varonil acento:yong mult Nada mortal. Desvuélvese su ovena Con ímpetu agilísimo. volando, rebuig ei nã Desvuélvese y al rápido torrente el 20 De Sofocles Hegά... m: gut cursilaaf [ zornenin 4b lopa vendiagno co cutoâ, etI Racin mas blando à giuri H Tiernísimos amores introduxo,, soll oirnM Quales nunca el insigne coliseoson obüsyçü Resonó de París. Y aunque vAgripinaqor on Elevados y nobles sentimientosa og vane vê Revuelva en su interior; Afranio ostente no De un romano la indómita firmeza, Y en Poro brille el generoso orgullo; T Nacido le creerás; ¡con qué armonía Procede sí con sosegado curso ! : Tal un arroyo la mullida yerba 07 Manso lamiendo va; luego sus ondas En la pradera floreal rodando, meget Por la menuda arena reluciente . Deslízase fugaz: la márgen pura ploded ca De flores se engalana: aquí de amantes El triste vulgo á suspirar acude. A Mustio llora, y sus lágrimas ardientes Cayendo acrecen las corrientes aguas, Que repitiendo van y redoblando ob obch Su amargo sollozar, y sus gemidos, velif Con susurro adormido remedando.sk, wil calo phai el onrmet a.. Traducción del Autor, impresa en el Blair castellano. cleans top at La comedia es la representacion de una accion popular presentada por un lado ridículo. Su objeto se encamina á pulir las costumbres, corregir el exterior, quitarnos la máscara, y presentarnos el espejo para que nos avergoncemos de nosotros mismos, puesta en claro la conducta que intentabamos ocultar. Fúndase en la malignidad de los hombres que se recrean en tildar con una complacencia mezclada de desprecio los defectos ligeros de sus semejantes, y reirse á sus expensas. Agrada, si los rasgos de la malignà alegría estan pintados con delicadeza y sazonados en la sorpresa. Ridículo cômico es un defecto que causa vergüenza, y no dolor: un delirio que no trae funestas consecuencias, porque á ser así, no excitaria la risa, sino la compasion: una contradicion de los pensamientos de un hombre, de sus sentimientos, de sus maneras, de su modo de obrar, con la naturaleza, con las costumbres, con los usos y con lo que parece exîgir la situacion presente de aquel en quien advertimos la deformidad. Los amores en un viejo, la gravedad estoica en un niño, el fraude en un hipócrita, la pretension de sabiduría en una muger, la teología en una hilandera... son asuntos ridículos, porque se oponen al decoro, al uso recibido, á la educacion y moral del mundo fino. Mas esto hay de notable en las comedias; que si pintan el ridículo de opinion, variada esta, se pierde la mayor parte de su agrado; señaladamente, si lo que entonces criticaban, llega despues á hacerse comun, y si se torna en ridículo, lo mismo que antes se estilaba entre la sociedad fina. He aquí á lo que se exponen las comedias que fundan su mérito principal en satirizar trages y modas, extravagancias y manías particulares. Conviene para remediar tan fatal inconveniente, combatir caractéres generales, y vicios comunes á todos siglos y paises, por exemplo, el amor propio, la vanidad, el ansia de figula adulacion, la codicia, la baxeza, rar, |